Santa Rosa de Lima: Oraciones, frases, reflexiones e imágenes nuevas

Venerada tanto en vida como luego de su muerte, Santa Rosa de Lima, llamada originalmente Isabel Flores de Oliva, nació el 20 de abril de 1586 en Lima Perú. Se convirtió en la primera santa en todas las Américas después de pasar toda su vida ayudando a los demás y dedicándose a la iglesia. A Santa Rosa se le han atribuido muchos milagros, tanto es así que se ganó el término de patrona de Lima y Perú y 50 años después de su muerte, fue canonizada.

Quién fue Santa Rosa de Lima?

Santa Rosa de Lima (20 de abril de 1586-24 de agosto de 1617) fue la primera persona nacida en América en ser canonizada como santa católica. Nacida en Lima, Perú, en 1586, tomó el nombre de Rosa en su confirmación en 1597. A temprana edad, entregó su vida a la oración y la mortificación que disgustó a sus padres pero que centró su atención indefectiblemente en Dios.

Al leer la biografía de Catalina de Siena, se inspiró para tomar a esa santa como modelo. Comenzó ayunando tres veces por semana. Luego añadió severas penitencias secretas, se cortó el pelo, se puso la «camiseta de pelo» en el cuerpo y un anillo con púas en la cabeza, e incluso se desfiguró la cara. Muchos de estos actos fueron realizados en contra de los deseos de sus padres y a pesar de las burlas de sus amigos. La recepción diaria de la Eucaristía la consoló.

Finalmente, decidió hacer un voto de virginidad y convertirse en monja. Esto presentó aún más pruebas y dificultades para Rosa, ya que una vez más sus padres se opusieron a ella, deseando en cambio que se casara. Finalmente obtuvo su permiso y, a los veinte años, recibió el hábito de Santo Domingo y, con el permiso de su consejero espiritual, se mudó permanentemente a una pequeña gruta construida en el jardín de sus padres, donde a menudo pasaba noches en oración.

Rosa se manifestó abiertamente contra la corrupción de los buscadores de riqueza españoles en el Nuevo Mundo, y sus sacrificios dejaron una profunda impresión en la gente de Lima. Muchos milagros siguieron a su muerte en 1617. Fue beatificada por Clemente IX en 1667 y canonizada en 1671 por Clemente X, el primer americano en recibir ese honor.

Oraciones para Santa Rosa de Lima

¡Oh Rosa hermosísima! Que prevenida con el celestial rocío de la gracia, floreciste entre nosotros en sublimes ejemplos de virginidad y paciencia, obtenednos el que corriendo en pos del suave perfume de vuestras virtudes seamos agradables a Jesucristo tu esposo divino.

Amén

Bendita y amada del Señor, y gloriosa Santa Rosa, por aquella felicidad que recibiste de poder unirnos a Dios y prepararnos para una santa muerte, alcánzame de tu divina Majestad la gracia de que purificando mi conciencia, con los sufrimientos de la enfermedad y con la confesión de mis pecados, merezca disponer mi alma, confortarla con el viático santísimo del cuerpo de Jesucristo a fin de asegurar el trance terrible de lo muerte, y poder volar por ello o la eterna bienaventuranza de la gloria.

Amén

Santa Rosa, “Rosa y Reina del Perú”, encendida en el amor a Dios y a la fe, te apartaste del mundo y te entregaste a Cristo en medio de admirables penitencias. Quisiste ser apóstol y llevar a todos los hombres hacia Jesús. Para ello renunciaste a tu hermosura y a tus atractivos humanos, mortificando tu cuerpo… Alcánzanos el camino de la verdadera vida para que lleguemos a gozar un día de los bienes eternos. Por Jesucristo nuestro Señor.

Amén

Gloriosa Santa Rosa de Lima, tú que supiste lo que es amar a Jesús con un corazón tan fino y generoso enséñanos tus grandes virtudes para que, siguiendo tu ejemplo, podamos gozar de tu protección en la tierra y de tu compañía en el cielo.

Amén

Oh Dios Omnipotente, dador de todo bien, que hiciste florecer en América por la gloria de la virginidad y paciencia a la bienaventurada Rosa, prevenida con el rocío de tu gracia; haz que nosotros, atraídos por el olor de su suavidad, merezcamos ser buen olor de Cristo. Por Jesucristo, Nuestro Señor.

Amén

Señor, Dios nuestro, Tú has querido que Santa Rosa se consagre totalmente a ti, por su amor virginal, y por su penitencia de amor.
Haz que guiados por el ejemplo de su caridad, seamos fecundos en el servicio de amor al prójimo, como buenos testigos del amor de Cristo.
Guiados por el ejemplo de Santa Rosa, fortalece Padre, nuestro amor a ti y a nuestros hermanos, junto a quienes queremos alabarte y bendecirte, por los siglos de los siglos.

Amén

Rosa, hermana nuestra que aprendiste a escuchar las necesidades de los demás ayúdanos a ser generosos y a compartir lo que somos y tenemos. Rosa, amiga nuestra mujer de fe y oración enséñanos a dejar un lugar para Dios en nuestro corazón para que El sea la roca firme en donde edifiquemos nuestra vida Rosa de Lima, que recorriste las calles de tu ciudad socorriendo a los pobres y acogiéndolos en tu casa ayúdanos a dejar a «Dios por Dios» y a descubrir en los más débiles a nuestro hermano y amigo. Rosa, que supiste ser una amiga confiable danos la fuerza para cuidarnos entre nosotros como vos cuidaste a tantos. Rosa, amiga y compañera de camino que experimentaste el dolor y la injusticia danos fuerza para que nunca nos separemos de Jesucristo tu hermano y el nuestro.

Amén

Santa Rosa de Lima: Reflexiones

1. Aparte de la cruz, no hay otra escalera por la que podamos llegar al cielo

2. ¡Cómo te amaré mi Dios, cómo te amaré Señor! Siendo yo tu criatura y Tú, Creador

3. Cuando servimos a los pobre y a los enfermos, servimos a Jesús. No debemos dejar de ayudar a nuestros vecinos porque en ellos servimos a Jesús.

4. ¡Oh si te amase mi Dios, si te amase y amándote me quedara ardiendo en llamas de amor!

5. Oh Santo Rosario que contienes todos los méritos de la oración vocal y toda la virtud de la oración mental.

6. El don de la gracia aumenta a medida que la lucha aumenta.

7. Cuando el amor de Dios nos toca se siente la alternancia de un gran padecer y grandes consuelos

8. No quiero esposo mío más riquezas, que adorarte, ni otro deseo que servirte. Pero cómo lo haré sin tu amparo?

9. El amor es duro, pero es nuestra esencia. Eso es lo que nos eleva por encima del resto de las criaturas.

10. Dios sea todo nuestro amor. ¡Oh quién pudiese hacer que todos le amásemos! ¡Ay de los que no le aman; no saben lo que es bondad!

Imágenes de Santa Rosa de Lima

Imagen de la procesión en el Día de Santa Rosa de Lima

Pintura de Santa Rosa de Lima con un niño en manos

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